jueves, 12 de marzo de 2015

Hablando se entiende la gente


          “- ¿Quién eres?
  - Es difícil de explicar
  - ¿Qué quieres?
  - A ti
  - ¿Para qué?
  - Me alimento de tu energía…”

Así fue como empezó mi diálogo con esa parte de mí  que no conocía. Podríamos decir que mi curiosidad infinita e insaciable me llevó a toparme con esto….

No era mi miedo, era algo que se alimentaba de la energía que yo desprendía cuando tenía miedo…
Por eso la única forma de “dialogar” era sin temerle. Mi miedo le daba poder, le daba forma. Pero sin él, era simplemente una bolita diminuta. Diminuta pero muy inteligente, ya que sabía perfectamente qué decir para activar los programas de duda, de malestar y de miedo.

Lo más paradójico de todo, fue que para llegar hasta aquí tuve que sentir un malestar tan grande que se me hizo insoportable. En el libro del Poder del Ahora, Eckhart Tolle, explica que tras un gran dolor fue cuando se dio cuenta de que él no era ese dolor, sino quién lo sentía. Gracias a su dolor pudo desidentificarse de la emoción.

Algo parecido me pasa cada mes; estoy bien, voy contenta, pero de repente me viene un malestar, una indignación; que obviamente achaco a mi periodo, pero también son tres días de reflexión, de introspección, tan necesarios y gratificantes, que si no existiera este malestar no pararía.
Recuerdo un mensaje leído en  un “Curso de Milagros, que dice algo así como: tanto las pesadillas como los sueños son parte de las ilusiones; puedes cambiar las pesadillas a sueños bonitos, pero seguirán siendo irreales.

-         Explícame para qué quieres mi energía
-         Para vivir. No tengo la capacidad que tienes tú de transformar el aire, el agua y el alimento en energía. Por eso necesito alguien de quién alimentarte. Y tú eres perfecto.
-         Pero, ¿por qué me generas miedo?
-         Primero, por que es lo más fácil de producir. Vives en un sistema que se basa en el miedo: “miedo a morir”, “miedo a no ser amado”, “miedo al abandono”, etc.. Desde que naciste trabajas con esos programas. Así es como te dominan, te manipulan. Para mi es muy fácil, solamente digo una palabra clave y automáticamente te conectas con el miedo. Y segundo, porque estoy creado para alimentarme de bajas vibraciones, más densas; no estoy preparado para digerir amor. Digamos que soy más parecido a un murciélago….
-         ¿Todos los humanos tenemos esto?
-         Los que siguen dormidos si.
-         ¿Cómo puedo hacer para que te vayas?
-         Ya lo estás haciendo, eres consciente de que existo y eso me debilita. Cuánto más confianza tienes más amor sientes.
-         Entonces, ya está
-         Mi misión acaba aquí. Ha sido un placer alimentarme de tus miedos, algunos eran incomprensibles, ridículos e incluso ilógicos, pero eso no lo sabrás hasta que sientas a tu propio ser….


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